El Parlamento pretende lavar la cara al Poder Judicial, bastante rayado por sus decisiones parcializadas e ilegales contra el Legislativo y la oposición en general. Si el Gobierno no se vale de alguna trampa, en un par de meses podrían haber nuevos magistrados.
Antes del 15 de agosto, cuando termina el primer período ordinario de sesiones de la Asamblea Nacional (AN), la bancada opositora aspira a haber reconstituido parcialmente la formación del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
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Así lo dijo el presidente de la Comisión Especial para el Rescate Institucional del TSJ, Carlos Berrizbeitia (Prove). Explicó que el procedimiento completo constará de cuatro fases: presentación a plenaria de los argumentos para revocar la decisión parlamentaria que nombró a 13 magistrados principales y a 21 suplentes; constitución de un nuevo comité de postulaciones judiciales; convocatoria y evaluación de aspirantes a magistrados, y designación de los 34 altos jueces.
«El tiempo que aspiramos a tomarnos para cumplir el mandato de la plenaria en este caso será menor. Nos instalamos este miércoles, nuestra primera reunión será el martes 14 de junio y ahí definiremos el cronograma de trabajo, pero creemos que nunca llegará a 30 días».
El subjefe de la bancada del PSUV en la AN, Víctor Clark, confirmó ayer que su partido no se sumará a esta instancia, pese a que la directiva dejó abiertas dos vacantes para el Bloque de la Patria, reseñó El Nacional.
Al respecto, el presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos (AD), descartó que la no participación del PSUV le reste legitimidad a la comisión: “Si alguien no se incorpora, eso no afecta su validez. Hay una mayoría que va a trabajar. Permitir que la ausencia de la minoría reste eficacia a la decisión de la comisión sería como permitirle derecho de veto a la minoría”.