Luego de la invasión a Ucrania ordenada por el presidente de Rusia Vladimir Putin, el líder ruso puso en “modo especial de combate” su arsenal nuclear en respuesta a las sanciones de Occidente y a las “declaraciones agresivas” que según el mandatario se habían vertido desde la OTAN.
El Ministerio de Defensa de Rusia aseguró que descubrieron en Ucrania pruebas de la “eliminación de emergencia” de rastros de un supuesto programa biológico-militar y por ello decidieron invadir Ucrania.
La OTAN, Estados Unidos y otros países calificaron esas afirmaciones de bulos y alertaron de que estas acusaciones podrían esconder una estrategia de “falsa bandera”: no sería más que un pretexto para atacar Ucrania con estas mismas armas. En este contexto, el 24 de marzo la Alianza anunció que activaba sus defensas contra ataques nucleares, biológicos y químicos, una prueba de que se toma esta amenaza muy en serio.
Las armas nucleares, químicas y biológicas constituyen el grupo de armas consideradas de destrucción masiva, son capaces de eliminar a un número muy elevado de personas de manera indiscriminada y causar grandes daños económicos y medioambientales.
Andrea Rizzi, corresponsal de asuntos globales en El País, indicó que Rusia ha demostrado en el pasado que es capaz de cruzar umbrales de destrucción en la búsqueda de concretar sus objetivos, por lo que no descarta el uso de su arsenal de armas nucleares contra Ucrania.
Guillem Colom, doctor en seguridad internacional y editor de Global Strategies, indicó que si Putin implementa armas nucleares en Ucrania podría atentar contra la vida de la humanidad y es por ello que esta amenaza debe ser tomada muy en serio.
«Esto cambiará totalmente la naturaleza de la Guerra en Ucrania», dijo.
Las armas químicas están prohibidas por un tratado firmado en el año de 1993 firmado por todos los miembros de la ONU, incluido Rusia , cuatro países no firmaron el acuerdo: Egipto, Israel, Corea del Norte y Sudán del Sur.
Por su parte, Jens Stoltenberg, secretario general de la OTAN denunció que Rusia acusó a Ucrania de tener armas nucleares, aclarando que este tipo de acusaciones son utilizadas como pretexto para hacer lo mismo.
De momento el uso de armas de destrucción masiva se mantiene solo como una amenaza por parte de Putin sobre la población de Ucrania, que está sometida al terror por los ataques rusos.
Redacción Maduradas con información de El País
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