Irene Olazo, esposa del capitán Juan Caguaripano, presunto responsable del asalto al Fuerte de Paramacay, exigió una fe de vida del excapitán de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), tras reportarse su desaparición forzosa el pasado 22 de agosto.
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“Si está muerto quiero ver su cuerpo. Si se lo llevaron a Cuba, aquí estoy, llévenme a verlo o si por el contrario lo mantienen recluido en la sede de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim), entonces denme una fe de vida“, manifestó.
En una entrevista exclusiva para Caraota Digital, Olazo aseguró que en varias oportunidades ha visitado la sede del Dgcim para llevar insumos a su esposo y los funcionarios se los han recibido, asegurándole que el oficial sí se encuentra en ese lugar.
“El centro de reclusión que dictaron en Tribunales fue el Sebin y se confirmó que mi esposo estuvo 10 días en el Dgcim irregularmente”, indicó.
Por su parte, Juan Caguaripano, padre del capitán, responsabilizó al gobierno de Nicolás Maduro de los maltratos físicos y psicológicos de los que pudiese estar siendo víctima su hijo, durante la reclusión, a la vez que confirmó que se están realizando los procedimientos correspondientes ante instancias internacionales para elevar el caso.
Sus allegados, puntualizaron que hasta el momento no han recibido el respaldo de ningún líder de la oposición o integrantes de asociaciones defensoras de derechos humanos, razón por la que pidió a todos los familiares de los implicados en el asalto al Fuerte de Paramacay “unir fuerzas“.
A continuación, la entrevista completa:
Redacción Maduradas con información de Caraota Digital
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