Las acusaciones presentadas este jueves 26 de marzo contra funcionarios del régimen de Nicolás Maduro representan un nuevo punto de inflexión en la estrategia de presión implementada por la administración de Donald Trump.
Los cargos presentados por el fiscal William Barr, aseguran las principales figuras del régimen actúan como cabecillas del Cártel de Los Soles, nombre que hace referencia a las insignias que los altos mandos militares venezolanos llevan en sus uniformes.
Explicaron que los miembros de la organización cooptaron el estado venezolano y se valieron de sus instituciones para, en colaboración con las FARC colombianas, enriquecerse mediante actos de corrupción y el tráfico de cocaína.
En paralelo, alega el fiscal norteamericano, “inundaron” Estados Unidos de esa sustancia y “perjudicaron a sus consumidores a través de las características dañinas y adictivas de la sustancia”.
Asimismo, detallan la manera en que lo hicieron, crímenes específicos cometidos por los perpetradores -sobresale la toma de sobornos y lavado de dinero- y hasta la manera en que gastaron parte del dinero malhabido.
Los activos comprendían aviones privados, ropa de lujo y hasta un pago de USD 40.000 al director de un concurso de belleza venezolano son algunos de los ejemplos.
Redacción Maduradas con información de Infobae
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