Las lágrimas de Doris Fonseca lo dijeron todo. Ella no quiere seguir viviendo en medio de tanto odio, por eso salió a ratificar su firma de cara al revocatorio. Ella tiene la esperanza de que sacar a Nicolás Maduro de la presidencia genere un cambio en Venezuela.
Doris llegó a su punto de validación en Plaza Venezuela, Caracas, acompañada por su pareja, ambos con discapacidad visual. “Lloro de emoción, por sentir que este es un paso para empezar a cambiar todo este terror que nos tiene sin salud, sin seguridad, sin unión”, dijo a las cámaras de Caraota Digital.
Esta señora que hizo conmover a muchos, pide que en el país cambie todo y sobre todo ese odio que el oficialismo sembró entre unos y otros. Confesó que a pesar de que el lunes se sintió frustrada al no poder asistir a la validación se rúbrica, eso no la detuvo y este martes dio su contribución por Venezuela