«El regreso a clases en octubre será a lo grande», aseveró el pasado viernes 20 de agosto Nicolás Maduro, quien espera que entre agosto y septiembre se llegue al 70 % de venezolanos vacunados contra el COVID-19, pese a que desde febrero -cuando llegaron al país las primeras dosis- hasta la fecha, apenas se ha inmunizado a un 5 % de una población de unos 30 millones de habitantes.
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«El regreso a clases presenciales en octubre va a ser a lo grande. Aspiro que el ritmo de vacunación continúe y estar en la frontera del 60-70% de inoculados para ese mes. Hay que preparar todo para el regreso a clases bajo el método 7+7. En eso debemos trabajar», sostuvo durante una alocución transmitida por Venezolana de Televisión (VTV).
Sin embargo, Gricelda Sánchez, secretaria de reclamos del Sindicato Venezolano de Maestros, confirmó al portal informativo Crónica Uno, que en una reciente visita a la comunidad de Carúpano, en el estado Sucre, vio escuelas completamente destruidas.
“De ocho escuelas que visité, seis estaban completamente destruidas, con huecos en los techos, sin pocetas ni bombillos, y filtraciones por todos lados”, relató Sánchez, quien a su juicio mira imposible el retorno a las clases.
Ninguno de los baños funciona, las paredes se están cayendo, los pasillos no tienen luz, las barras de las rejas están rotas o parcialmente desprendidas, esa fue la dramática descripción que hizo, por ejemplo, de la Escuela República de Haití, una de las más emblemáticas de esa comunidad.
Redacción Maduradas con información de Crónica Uno
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