El gobierno que se dice revolucionario y socialista ha intentado de distintas maneras maquillar las cifras que aportan indicadores sociales, como el nivel de pobreza, miseria o desempleo y la razón es simple, en vez de disminuir estos factores, por el contrario, los ha aumentado. Sin embargo, no es posible tapar con el sol con un dedo.
La realidad es que el pueblo tiene hambre, y la escasez de alimentos y la inflación que ha disparado el costo de la vida, obliga a familias venezolanas a comer restos de basura que consiguen en la calle.
Captura video El Cooperante.
En un video aficionado publicado por El Cooperante, se puede ver a una madre con cuatro niños menores de edad, hurgando en los desechos sólidos de los vecinos de la urbanización San Jacinto de la ciudad de Maracay, estado Aragua, para poder “alimentarse”.
Nos comenta la fuente que en la misma calle donde fue grabado el material audiovisual, se encuentra apostada, de manera permanente, una alcabala de la Guardia Nacional (GN), custodiando la residencia del ministro de Fronteras, el General Gerardo Izquierdo Torres.