El holandés Piet Ploeg perdió a su hermano, su cuñada y su sobrino cuando el vuelo MH17 de Malaysian Airlines fue derribado sobre Ucrania el 17 de julio de 2014.
BBC
El avión salió del aeropuerto de Schiphol, en Ámsterdam, Países Bajos, con destino a Kuala Lumpur, la capital malasia. Dos tercios de los pasajeros eran holandeses.
Países Bajos quedó con la investigación del caso bajo su cargo, mismo del que ya comenzó el juicio en Ámsterdam, donde se juzga a tres rusos y un ucraniano por derribar el avión con un misil de fabricación rusa.
Según la investigación, una división del ejército ruso sería el responsable del ataque, se trata de la brigada de misiles antiaéreos número 53, con sede en Kursk, Rusia, cerca de la frontera con Ucrania.
De las víctimas, solo dos no fueron localizados, entre ellos el hermano de Ploeg.
«Vimos a mi hermano caminando con su mujer hacia la puerta de embarque, así que sabemos que estaba allí. Pero nada vino de vuelta», explicó.
Del mismo modo, señaló: «No puedes explicarle a nadie lo extraño que es. Y aquí estamos, cinco años y medio después, y aún no han hallado nada. No hay restos humanos, no hay equipaje, es como si nunca hubiera existido».
Además exlicó que el Instituto Forense le envió un listado de las partes que hallaron del cuerpo de su sobrino:
«Mi sobrino volvió en 80 pedazos… no lo puedo describir«, señaló.
Redacción Maduradas con información de El Nacional
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