Inhumano. En la Guajira, los wayuus alimentan a sus hijos con los huesos que botan las carnicerías debido a la brutal malnutrición que golpea a la población indígena que además de alimentarse con huesos putrefactos y atestados de moscas, también debe conseguir agua para beber en estanques.
El acceso a los alimentos es difícil en las zonas urbanas. En las rurales es mucho peor. En la Guajira la desnutrición no es nada nuevo dicen algunos de sus habitantes. El detalle es que los centros de recuperación nutricional que antes existían desaparecieron. Esto y la escasez hacen una mala combinación para quienes viven en la zona.
Foto: Lenin Danieri.
La representante del comité de DDHH Lisseth Mogollón advierte que todos los servicios públicos fallan en La Guajira, inclusive algunas zonas beben agua de estanques que muchos son insalubres. “Fallecieron dos niños uno de 8 meses y otro de dos años provenientes de la alta Guajira del distrito militar Guajira del estado Zulia por malnutrición“.
Lo que antes se veía en los rellenos sanitarios o municipios foráneos, se aprecia prácticamente en cada esquina. Una familia de wayuus acompañados de otros, esperaban los huesos que botan las carnicerías en el mercado las playitas de Maracaibo.
Esos huesos repletos de moscas estaban incluidos en el menú del día comentaba Norelis Fernández, quien ayudaba a recolectarlos. “Eso lo pican ahorita viene el esposo de la señora y los pican y los pican chiquiticos y se llevan por sacos y compran yuca creo que yo y lo hacen sopa para los hijos de ellos“.
Según expertos en medicina la desnutrición deja secuelas severas dependiendo del grado en que afecte a cada paciente que van desde problemas de crecimiento hasta afectación en los órganos internos.
Con información de FM Center