El subsecretario adjunto para América Latina del Departamento de Estado, Alex Lee, en nombre del Gobierno de EE.UU., insistió este martes ante el Congreso, en que con las acciones tomadas contra Venezuela no pretenden derrocar el Gobierno, sin embargo, llamó a aunar esfuerzos con socios latinoamericanos para buscar solución a la crisis que aqueja al país que tiene a Estados Unidos como principal socio comercial.
Por otro lado, el parlamentario aseguró que base fundamental para que las tensiones se alivien en el país es que las elecciones parlamentarias previstas para este año en Venezuela se lleven a cabo de la manera más transparente, dando así tranquilidad y confianza a los habitantes.
«Quiero ser claro: no es nuestra política o nuestra intención la de promover la inestabilidad en Venezuela o avalar soluciones a los problemas políticos de Venezuela que son acordes con su propio sistema legal», dijo Lee en alusión a las recientes sanciones impuestas contra varios altos cargos venezolanos por supuestas violaciones de derechos humanos.
«EE.UU. -agregó- no busca la caída de la Gobierno venezolano ni trata de sabotear la economía venezolana. Continuamos siendo el mayor socio comercial de Venezuela».
«El presidente Maduro -prosiguió- ha expresado públicamente el deseo de mejorar nuestra relación bilateral, y estamos abiertos al diálogo. Mantenemos las relaciones diplomáticas y damos la bienvenida a las conversaciones y el debate».
El diplomático subrayó la importancia de que las elecciones parlamentarias previstas para este año en Venezuela se lleven a cabo de la manera más transparente, e indicó que Estados Unidos ya les ha transmitido su deseo de impulsar una misión internacional electoral que garanticen la transparencia del proceso.
«Las elecciones de la Asamblea Nacional de este año -explicó- representan una oportunidad para los venezolanos de participar en un discurso legítimo y democrático», dijo.
«Unos resultados creíbles de las elecciones -añadió Lee- podrían reducir las tensiones en Venezuela. Hemos instado a los socios regionales a alentar a Venezuela a aceptar una misión de observación electoral internacional sólida».
«Ahora, es el momento para la región de colaborar juntos para ayudar a Venezuela a trabajar por una solución democrática a los desafíos que enfrenta el país», agregó.
Con información de El Universal.