Una joven pareja originaria de Maracaibo (estado Zulia) regresó, recientemente, a Venezuela, luego de haber vivido dos años en Quito (Ecuador).
Crónica Uno/Mariela Nava
Ronaldo Cerpa, de 24 años de edad, manifestó que no volverían a migrar y calificó la experiencia como “fea”.
“Me devolví porque me hacía falta mi familia, emigrar es feo”, contó a Crónica Uno.
Manifestó que, estando en Ecuador, les costó mantener los empleos que conseguían y sufrieron algunos maltratos por parte de sus empleadores. Sin embargo, la peor parte fue la depresión que padeció Cerpa y que su esposa, Elaine Parra, de 22 años de edad, notó y aseveró que le preocupaba.
Además, como uno de sus trabajos era vendiendo refrescos en locales de Quito, pronto su salud se vio comprometida. Entonces, Cerpa sufrió de depresión y de malestares gripales que le imposibilitaron trabajar con regularidad.
La pareja aseguró que, al cabo de un año en Ecuador, pudieron tener todas las cosas necesarias para vivir, pero apenas compartían, ya que sus horarios no coincidían.
“Para mí, no vale la pena trabajar tanto porque lo haces por más de 12 horas. Yo llegaba a la casa y ella no estaba (…). Siempre conseguí y nunca me negué a hacer ningún trabajo, pero casi nunca nos veíamos (…). Llegaba a la casa y estaba solo”, comentó el muchacho.
Actualmente, aunque padecen la crisis de servicios básicos en Maracaibo, decidieron emprender y además pueden compartir con sus seres queridos. Adicionalmente, reconocen que se están “reencontrando” como pareja.
Redacción Maduradas con información de Crónica Uno
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