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¡EL PUEBLO TIENE HAMBRE! Compradores protestaron tras ser sacados de colas del Bicentenario

“El pueblo está cansado, tiene hambre y el gobierno no le da comida. La guardia está defendiendo a un Presidente que está matando al pueblo de hambre. Aquí están dejando entrar sólo a los enchufados y a los amigos de los guardias… El país se te derrumbó Maduro (Nicolás) y tú viajando. Perdí mi día de trabajo por hacer esta cola y no compré nada”.    

A las 6:10 pm de ayer, la GNB empezó a cerrar las rejas de ambas entradas del centro comercial Judibana donde está Abasto Bicentenario y a sacar a la fuerza, a los usuarios.

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Esas fueron algunas de las frases que gritó anoche Régulo Mota, tras ser sacado, junto con un grupo de ciudadanos, de la larga fila que iniciaron antes de las 6:00 de la mañana de ayer para comprar algunos de los productos regulados escasos que estaban vendiendo en el Abasto Bicentenario ubicado en el centro comercial Judibana, en Puerto La Cruz.

El hombre y las otras personas que se encontraban allí, acudieron al expendio porque ayer les tocaba a los que tienen cédula de identidad que terminan en 2 y 3. En el recinto había papel higiénico, pollo, carne, aceite, margarina, detergente y harina de maíz.

El despelote que se formó en los dos portones de acceso al Judibana comenzó a eso de las 6:10 pm, cuando los efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) empezaron a cerrar las rejas de ambas entradas y a sacar, incluso a la fuerza, a las personas que estaban en la cola y que les pedían que las dejaran pasar por haber permanecido más de 12 horas en cola.

La acción de la GNB provocó protestas en ambas entradas del  centro comercial (por las avenidas Municipal y Estadio), que duraron hasta las 7:15 pm. 15 minutos antes los uniformados sacaron a empujones a varias personas que intentaban abrir uno de los portones.

Un hombre que estaba en la fila fue detenido, golpeado y metido en una patrulla tras intentar hacer fotografías del “atropello contra el pueblo que están cometiendo los guardias en la puerta del abasto y en los portones”, dijo una joven que se identificó como Vanessa, quien denunció que fue golpeada en la mano derecha por un efectivo.

La sexagenaria Carmen Lugo, residente de la calle Páez de Barrio Marino de la ciudad porteña, denunció que durante el día la GNB dejaba entrar sólo a grupos que llegaban y no estaban en las colas. “Aquí dejan pasar puro enchufados que trabajan en alcaldías o los amigos de los guardas. Esto es una falta de respeto”.

Con sus hijos en brazos, Eveling y Shandra Gómez, habitantes de los Altos de Sucre, salieron del Bicentenario a las 7:02  pm sin haber  comprado nada, a pesar de  que llegaron a las 6:00 am y les colocaron en su antebrazo derecho los números 112 y 113.

“Nos marcaron como a  unas vacas en la mañana y en la noche nos sacan a la fuerza sin importarles los niños. Tú viste como nos tratan los guardias y escuchaste las groserías y los insultos que nos dicen… Así ha sido todo el día, esto es una burla”, se quejó Eveling.

La respuesta de un efectivo de baja estatura no se hizo esperar: “Todo el tiempo es el mismo peo, o se van o se van”.

La porteña Cila Totesaut, de 59 años, tenía en su brazo el número 80 (llegó a las 6:00 am) y tampoco logró adquirir nada. “Pero sí están dejando pasar carros full de personas a comprar,  como lo estás viendo para que compruebes que no son inventos míos”.

Señalaron a los efectivos de apellido Rondón, García y Sandoval de propiciar las agresiones físicas y verbales contra ellos.

Mirelvys Malavé (Pozuelo), Margarita Macuare (San Diego) y José Guerra, marcados con los números 125, 130 y 150   se fueron anoche con las manos vacías.

Macuare, de la tercera edad y quien sufre de hipertensión arterial y tiene una infección pulmonar, criticó la acción de los guardias nacionales y la supuesta operación “morrocoy” que están aplicando las cajeras de la tienda para que quede mercancía para el día siguiente y “seguir con el circo montado de que hay comida y que es mentira la escasez”.

Más temprano

En la mañana y tarde de ayer los usuarios de este abasto denunciaron lentitud en las colas.

Luisa Ortega era una de las que a las 3:00 pm esperaba por ser atendida. Se quejó, porque a su juicio, el sistema de ingreso “es demasiado lento”. Aseguró que llegó a las 6:00 am, “y nadie me da esperanza sí compraré o no”.

Lucía García también expresó su molestia. Contó que observó cómo había hombres y mujeres que entraban a la tienda y salían “con las manos vacías”.

Un vocero de Abastos Bicentenario, cuya identidad se mantiene bajo reserva por no estar autorizado a declarar, informó que allí está atendiendo a 1.500 personas por día, pese a que en épocas pasadas la asistencia era de 1.000.

Aseguró que una vez que contabilizan a los 1.500 usuarios, le advierten a quienes están en las colas que no podrán ser atendidos, pero se niegan a desalojar los alrededores  porque tienen la esperanza de ingresar para adquirir productos de la cesta básica.

Señaló que junto con los cuerpos de seguridad están haciendo labores de inteligencia para determinar quiénes se han dedicado a permanecer en las filas para hacer negocio con  las vacantes.

Partido Comunista de Venezuela pide revisar distribución

Ayer en rueda de prensa, el comité regional del Partido Comunista de Venezuela (PCV) exhortó al Gobierno nacional a revisar y fiscalizar la red de distribución propuesta por el Ejecutivo porque también se presta para el desvió de alimentos. El secretario político de la tolda, Orlando Aguilera, advirtió que Representaciones Herrera, que recientemente fue intervenida, formaba parte de la red impulsada por el Estado venezolano. A su juicio “la guerra económica no escapa de los vínculos que existen con el imperio norteamericano, y las empresas que se han dedicado a recibir dólares y no importar los alimentos.

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