Recientemente, allegados a la joven venezolana Julieta Hernández, quien habría sido asesinada en el estado brasileño Amazonas, cuando viajaba, en bicileta, hacia su lugar de origen Puerto Ordaz (estado Bolívar), difundieron un audio que correspondería con un texto que la mujer les habría compartido antes de emprender su viaje.
Julieta Hernández (@utopiamaceradaenchocolate)
En el texto, la mujer afirmaba que le consultaban mucho hacia dónde se dirigía.
«Mi destino realmente está a punto de alcanzarme. Está a punto de irse, de venir, de encontrarme, de perderse. ¡Mi destino para este viaje es Venezuela! ¡Venezuela es uno de mis destinos! Pero también hay otros, varios, innombrables, invisibles, pequeños, grandes, sorprendentes, paisajes, animales, matorrales, gente, olor a mango rosado con olor a rosa con olor a mar en mi pie descalzo, una nube, una música, una idea. (…) Mi destino está a poco más de 30 km. O un paso de distancia o un segundo de tiempo, no lo sé. Mi destino también está aquí y ahora. ¡Mi destino está en el regazo de mi madre!», indica parte del mensaje.
Así mismo agrega: «Pero también lo es, a veces, en otros lugares. Quién sabe, ¿a veces ser el regazo de alguien es también mi destino? Por eso, cuando alguien me pregunta ‘entonces, ¿cuál es el destino de tu viaje?’, me encojo de hombros, respiro hondo y, sonriendo, respondo: ¡Venezuela! ¡Porque, quizás, nadie está preparado para imaginar que es posible encajar tantas palabras en un solo destino!».
Vale mencionar que Hernández habría estado desaparecida desde el pasado 22 de diciembre, cuando sus familiares habían perdido total contacto con ella. Desde entonces, habían iniciado una intensa búsqueda, ya que la joven solía pernoctar en viviendas de personas que le abrían la puerta en su viaje.
Por la muerte, fueron detenidos Thiago da Silva y Deliomara dos Anjos, una pareja que habría acogido a la muchacha. Fue, de hecho, en un terreno cercano a la vivienda de estos donde fueron hallados los restos de la mujer y su bicicleta. Al parecer, habría muerto por asfixia, pero había más señales de violencia, incluida violencia sexual.
De acuerdo con el portal El Diario NY, las autoridades hallaron el teléfono celular y la tienda de campaña, que llevaba detrás de su bicicleta, en el techo de la vivienda. Sus otras pertenencias fueron arrojadas al río.
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Redacción Maduradas con información de El Diario NY
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