Gustavo Castillo es un venezolano que actualmente reside en Buenos Aires, Argentina, donde con mucho esfuerzo logró montar un negocio con el que está teniendo mucho éxito.
Foto: Clarín
Se trata de un local de venta de donas y, de acuerdo con lo reseñado por el Clarín, las personas hacen largas colas para poder adquirir una de las deliciosas donas que cuestan entre 50 y 60 pesos argentinos.
El joven afirma no competir con otras empresas. No obstante, ha ocurrido que diversas panaderías se han mostrado “celosas” de que haya personas haciendo fila, para comprar algo que podría ser una factura.
El joven es caraqueño y se considera parte de la ‘primera camada’ de venezolanos que emigraron. “Cuando me fui, Caracas todavía era bien chévere. Pero me fui porque estaba asustado, resignado”, indicó.
Foto: Clarín
El negocio de Castillo lleva por nombre “Donut Therapy” y parece ser el escenario indicado para la resurrección de la dona en la capital de Argentina.
Contó además todas las cosas que tuvo que pasar y trabajar desde su llegada al país suramericano. Dijo que trabajó bares, bistrós, restaurantes, hasta que llegó al Hotel Faena, donde se hizo cargo de la cocina en los shows de tango.
“Estaba harto. Quería dejar la cocina. Cansado del maltrato y los sueldos de miseria”, sentenció.
Redacción Maduradas con información de Clarín
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