El portal español El País denunció, en un artículo, la existencia de una trama de corrupción que utilizó al menos 100 empresas fantasma para ocultar propiedades en Venezuela, obtenidas por la malversación de más de 2.000 millones de euros provenientes de Petróleos de Venezuela (Pdvsa).
EFE
Las empresas, llamadas también “empresas de maletín, fueron supuestamente ideadas por el empresa Diego Salazar, quien controló el tinglado de las 100 compañías. De hecho, recientemente, el Ministerio Público (MP) venezolano ubicó a Salazar como un “socio” de Rafael Ramírez, quien fue ministro de Petróleo y presidente de Pdvsa, durante el régimen de Hugo Chávez.
La red se constituyó entre 2004 y 2016 y controló, de forma directa, a unas 28 propiedades, una de las cuales sería un apartamento junto a la playa de Tucacas en el estado Falcón.
Sin embargo, la “maraña societaria” tenía un error: la mayoría de las compañías tenían el mismo domicilio fiscal y 39 de ella se encontraban en el centro de negocios de Salazar, es decir, una serie de oficinas en la Torre Edicampo del municipio Chacao. Inversiones CS, cuyo accionista era Luis Mariano Rodríguez, primo de Salazar, tenía 11 locales comerciales a su nombre.
El tinglado fue descubierto durante las investigaciones del saqueo de la petrolera estatal. Al “tirar de los hilos” de las empresas, fueron descubriendo que las supuesta compañías ocupaban locales vacíos.
La Fiscalía de Venezuela señaló a Salazar de haber ideado una trama que, además, cobró jugosas comisiones a empresas entre 2007 y 2012, gracias a su relación con su primo Rafael Ramírez. La organización de Salazar habría blanqueado en Andorra un total de 1.347 millones de dólares entre 2011 y 2012.
Redacción Maduradas con información de El País
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