El expresidente de Pdvsa Rafael Ramírez denunció que el régimen de Nicolás Maduro pone en marcha la «Inquisición 2.0», una suerte de plan cibernético para «destruir a quien considere su enemigo» mediante la plataforma digital.
Composición: Maduradas/ Fotos. EFE- Euroresidentes- Reuters
«La agresión es precedida por una intensa campaña de descrédito en las redes sociales. El gobierno, a través de un uso delictivo de los recursos del Estado y sus operadores económicos, ha conformado, con apoyo externo, una inmensa plataforma de ‘bots’ y grupos de tuiteros«, asegura Ramírez en un artículo de opinión.
Detalla que, en cada dependencia del estado (ministerio, gobernación, alcaldía) existe «una nómina entera dedicada a la plataforma de redes». Quienes forman parte de esta nómina, dice Ramírez, reciben instrucciones «del ministro de la manipulación y mentira (en referencia a Jorge Rodríguez) o de cualquiera de los nuevos ‘jefes'».
«Tienen una lista de dirigentes a quienes deben atacar, destruir, vilipendiar. No importa de qué se trate, hay que atacarlo, utilizando el argumento de la corrupción, el insulto, saturar las redes de basura. Son expertos en la “guerra sucia”, allí se montan ‘ollas’ y ‘falsos positivos’, como la antesala a una amenaza o acusación de Maduro o de Tarek William Saab», señala.
La segunda fase de esta «inquisición 2.0» es «una acción judicial, un allanamiento o una detención-secuestro por parte de los cuerpos de seguridad».
De acuerdo con Ramírez, estos grupos de Twitter, “bots” y “salas situacionales” consiguen «manipular las redes, desinformar, confundir y crear tendencias de lo que sea».
Como es de imaginar, estas operaciones resultan bastante costosas para el Estado venezolano y, según Ramírez, «mucha gente ha hecho de esto un gran negocio con tarifas en dólares».
Redacción Maduradas con información de RafaelRamirez.Net
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