La intolerancia es uno de los peores males de la humanidad, que vive pendiente de criticar a los demás sin antes evaluar el comportamiento de sí misma, causante de la mayoría de las tragedias de este mundo.
Luego de que la madrugada de este domingo Omar Mateen irrumpieran en un local gay de Orlando, en Estados Unidos, y acabara con la vida de al menos 49 personas, un pastor bautista venezolano, radicado en EE.UU., indicó que la muerte de esas personas le parece “grandioso” y es que debido a su juicio, este hecho “beneficia a la sociedad”, reseñó FM Center.
La polémica no quedó ahí, pues en una entrevista el pastor Roger Jiménez expresó que el gobierno de Estados Unidos debería juntar a los homosexuales, “que los ponga en un pelotón de fusilamiento y les vuele los sesos».
El pastor afirmó que los homosexuales son “depredadores, abusadores” y calificó de “trágico” que no hayan muerto más durante la masacre al bar gay de Orlando, Florida.
“No estoy celebrando la muerte. Hay una diferencia de celebrar y estar triste. Yo no estoy triste que se murieran”.
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Con información de FM Center.