El presidente de la Asamblea Nacional, diputado Henry Ramos Allup, ha estado acompañando las jornadas de validación de firmas desde que comenzaron. Este martes 21 de junio se trasladó al polideportivo La Boyera, desde donde infundió optimismo y ratificó lo que tantas veces ha dicho: cuando la gente quiere hablar, lo hace.
«El proceso ha sido una maravilla. La gente es superior a cualquier trampa, a cualquier añagaza, a cualquier vagabundería de las comadres o del Ejecutivo o de las Fuerzas Armadas, de quien sea. No pueden con la gente porque la gente cuando se quiere expresa se expresa», destacó el parlamentario.
Criticó que el gobierno, a través de su influencia en el Poder Electoral, intente hacer del proceso para la activación del referendo revocatorio una carrera de obstáculos para los ciudadanos. «¿En qué país civilizado del mundo se pone tal cantidad de trabas para que la gente exprese su opinión?», preguntó.
Por otro lado, dijo que le tenía una «mala noticia» al gobierno (y, por supuesto, a las rectoras del órgano electoral, a las que llama «las comadres»): «En los lugares en donde creían que no iba a fluir la gente por las distancias, por la represión de los gobiernos locales, etc, como en Cojedes, Guárico, Portuguesa y Apure han sido sorprendentes».