Esta es la triste historia de un niño de 11 años que el pasado sábado asesinó a su abuela por presionarlo para que limpiara su habitación.
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Según relató su abuelo Herbert W. Doyle, veían televisión y en varias oportunidades se le ordenó al menor que recogiera sus cosas pero el joven se negó en cada una de ellas.
Su abuela identificada como Yvonne Woodard pidió que la cámara la colocara en su lugar, pero esa fue la última vez que lo hizo. En ese momento el pequeño fue por el arma que guardaba su abuelo y se colocó detrás del sillón donde descansaba la pareja. Segundos después Yvonne recibió un disparo en la nuca.
Doyle cuenta que luego del crimen, corrió por un momento detrás de su nieto pero se regresó a ver a su esposa. Fue entonces cuando escuchó un segundo disparo y vio al niño caer al suelo: se había quitado la vida.
«Eran una buena familia. El niño solía andar en bicicleta y jugar en el vecindario», dijo uno de los vecinos.
Tras el suceso, las autoridades del Litchfield Elementary School District, escuela donde estudiaba el niño, emitieron un comunicado donde lamentaron el hecho y mencionaron que van a proporcionar ayuda psicológica a todos los estudiantes del plantel que así lo requieran.
Redacción Maduradas con información de Infobae
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