Recientemente, se dio a conocer un informe, elaborado por la ONG Coalición por los Derechos Humanos y la Democracia, en el que quedó en evidencia que, en Venezuela, existe una suerte de patrón de desaparición forzosa para las víctimas que son sometidas a «torturas».
Efecto Cocuyo
De hecho, Ana Leonor Acosta, abogada y directora de la referida coalición, aseguró que, en Venezuela, la tortura es ya parte de las instituciones.
«(Se ha) institucionalizado la tortura», dijo, en entrevista brindada a La Voz de América. Además, señaló que existe una «evidente complicidad» de jueces y fiscales.
Detalló que han detectado que la mayoría de estas víctimas llegan a los tribunales llegan sangrando ante jueces y estos no ejecutan acciones en torno a ello.
«Por eso, nosotros estamos hablando de la complicidad de las instituciones, por eso nosotros estamos hablando de la indiferencia de los funcionarios públicos«, agregó.
Entre los patrones de tortura más frecuentes que reportan las víctimas que han entrevistado, un total de 20 personas, destacan golpizas, posturas en tensión (estar atado a una silla durante varios días), suspensión, uso de descargas eléctricas, ahogamiento, arrastre y abuso sexual.
La experta añadió: «La víctima, delante del juez, hace la denuncia con respecto a los actos de tortura y la mayoría de las veces no quedan reflejadas en las actas. De ninguna manera se protege a las víctimas y de ninguna manera se persigue o investiga«.
Redacción Maduradas con información de VOA
De interés:
¡SEPA! Conviasa habilitará otros 8 destinos internacionales durante el primer semestre de 2022