Eduardo Stein, representante especial del ACNUR, la agencia de la ONU para los refugiados, y de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), alertó que el éxodo de venezolanos está alcanzando lo que denominó un «punto de inflexión», ya que, a su juicio, la respuesta a la crisis sigue estando «críticamente desfinanciada».
Schneyder Mendoza/AFP
Justificó esto último con el hecho de que al menos 5,6 millones de venezolanos, una cifra récord si se considera que la población está conformada por 30 millones personas, han abandonado su país desde 2015. Esta situación se ha convertido en la mayor crisis de desplazamiento externo de la historia de la región y la menos atendida, además.
«Nunca en nuestra historia en América Latina nos hemos enfrentado a tal movimiento de personas que salen de un país que era uno de los más ricos de la región y que no está en guerra. Lo que falle en uno de los países más grandes y ricos del subcontinente va a afectar al resto de la región. América Latina nunca será la misma«, aseguró Stein a The Guardian.
En ese sentido, explicó que la razón de la falta de financiamiento para frenar esta migración tendría que ver con la pandemia, ya que el covid-19 ha golpeado, «duramente», a los países desarrollados que, tradicionalmente, donaban a estas causas.
«No creemos que los países latinoamericanos sean capaces por sí solos de hacer frente a esta situación», advirtió, por lo que aplaudió la conferencia celebrada en Canadá en la que gobiernos y organismos se comprometieron a aportar $1,500 millones para atender la crisis.
Sin embargo, Dany Bahar, investigador principal de la Brookings Institution, alertó que sigue existiendo «una gran brecha» en la ayuda a los refugiados venezolanos, en comparación con otras crisis modernas, como la de Siria.
«La mayoría de los países de acogida en la crisis de los refugiados venezolanos están en la región, y son países en desarrollo. Mientras que Europa tenía mucha piel en el caso de los sirios. Quizá eso provocó una financiación mucho más generosa«, aseveró.
Redacción Maduradas con información de The Guardian
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