Una joven de 22 años, de nombre Paula Díaz, fue asaltada y casi asesinada en el estacionamiento del Centro Comercial San Ignacio (CSI). Aseguró que está viva por no oponer resistencia.
La joven, que se desempeña como actriz y locutora, además de ser estudiante del séptimo semestre de Comunicación Social, había salido un ensayo de improvisación de La Escuela del Humor en el Centro Perú. Así lo narró en Prodavinci.
Como días antes le habían robado el caucho de repuesto de su Aveo, prefirió estacionar el vehículo en el estacionamiento del CSI para poder pagar con tarjeta. La intención era que, luego del ensayo, procuraría adquirir un nuevo caucho.
A eso de las 4:20 de la tarde, la joven, conocida también como “Poly”, salió de su ensayo, se dirigió al CSI, canceló el estacionamiento y fue a su vehículo.
Paula advirtió que no había ningún guardia de seguridad en el sótano dos. Solo observó a un hombre inmóvil frente a un automóvil y, aunque eso la inquietó, se calmó a sí misma.
Cuando la actriz estaba ya en su carro, el hombre se escabulló sin que ella lo notara y la interceptó. La lanzó sobre los asientos del vehículo y colocó sus manos alrededor del cuello de la joven para asfixiarla.
Al principio, Paula asegura que opuso resistencia, pero que, poco a poco, prefirió no hacer nada.
“Cállate, maldita, perra”, murmuró el hombre en medio del forcejeo.
A su vez, mientras se dejaba ir, la muchacha pensó: “¿Esta es la forma en que me voy a morir?”. Así mismo, se cuestionó, mientras veía pequeños puntos blancos y negros sobre el techo del carro, si así se “sentía la eternidad”, como “un manto negro que cubre los ojos”.
Despertó poco tiempo después, sola dentro de su vehículo, con el rostro morado y signos que la forense que la examinó después manifestó solo haber visto en cadáveres.
Luego, revisando las cintas de seguridad, todos concordaron que el ataque fue premeditado y que, probablemente, el “asesino” creyó que había matado a la joven. Solo se llevó pertenencias menores de la muchacha. En cambio, dejó su teléfono y su monedero.
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Redacción Maduradas con información de Prodavinci
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