Una paciente oncológico, identificada como Aurora Betancourt, sufre las consecuencias de la crisis hospitalaria en el país. Los médicos sólo le recetan acetaminofén para calmar el dolor, porque no tienen cómo atenderla.
“No me quiero morir, yo estoy joven todavía, y hay veces que me aferro a la vida pero si los medicamentos no se consiguen”, dice la paciente que no tiene acceso a los medicamentos.
Aurora perdió a su hermana víctima de la misma enfermedad y no quiere correr con la misma suerte, tiene un tumor en el seno, no cuenta con los tratamientos que requiere y también sufre los problemas que padecen todos los venezolanos como el acceso a los alimentos y transporte.
Solo puede calmar parcialmente sus dolores al tomar acetaminofén: «a veces se me calma, no se me quita… Después me vuelve otra vez”.
Redacción Maduradas con información de Sumarium.
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