Un trabajo realizado por la periodista Sofía Pérez para El Diario, reseña la historia de una enfermera en Caracas que recurre a la prostitución para poder llevar el sustento diario a su hogar.
El Diario
Una mujer que se encontraba en la avenida de las Acacias, en Caracas, conocida como la calle de los hoteles, junto a otras mujeres, contó abiertamente su historia, aunque prefirió que su identidad no quedara revelada.
Cristina, nombre ficticio que se le dio para el trabajo, señaló que se graduó como licenciada en Enfermería en 2017, aunque su sueño era ser médico, reconoció que eso le parecía «muy arrecho».
Tiene dos hijos y un esposo, quien recibió un disparo cuando intentaron robarle su motocicleta y quedó discapacitado.
Su sueldo como enfermera es de aproximadamente 4,52 dólares, monto que no es suficiente para mantener su hogar y reconoció las dificultades que atraviesan sus hijos:
«Es difícil cuando te piden pan y no tienes; cuando no los puedes mandar a la escuela porque no tienes con qué rellenar la arepa o simplemente no tienes nada».
La enfermera señaló que pasaba con frecuencia por la calle de los hoteles porque cuidaba a una anciana por la zona, hasta que la mujer falleció y la necesidad de atender los gastos de su familia la llevaron a ofrecer sus servicios en esa avenida caraqueña tres veces por semana.
«La última vez que pasé por aquí, vi en la otra esquina a un hombre pagando cinco dólares. Yo pensé en mis hijos, mamita. Mi trabajo no me daba para mantener yo sola la casa. Así que comencé», manifestó indignada.
La mujer confesó que le miente a su esposo e hijos sobre su trabajo como enfermera, les dijo que encontró un empleo por las noches tres veces a la semana cuidando a una persona.
Durante esas tres jornadas consigue el doble del sueldo mínimo integran en Venezuela que equivale a 800.000 bolívares.
Incluso reconoció que ha tenido que practicar sexo oral solo por una harina de maíz precocida y algunas latas de atún.
Redacción Maduradas con información de El Diario
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