Tras 11 años de que se realizara la autopsia del cantante fallecido Michael Jackson se conocieron detalles sobre el estado en que se encontraba la estrella antes de morir.
BBC
En meses pasados se conoció que para el momento de su muerte el Rey del Pop tenía pastillas parcialmente disueltas en su estómago y se descubrió que sobrevivía con apenas una comida al día.
Además se supo que tenía marcas de pinchazos por inyecciones de analgésicos que le suministraba su médico personal, Conrad Murray, quien fue señalado de homicidio involuntario por administrar de forma incorrecta la droga que condujo a la muerte del artista.
También se supo que los labios del cantante habían sido tatuados de color rosado, mientras que sus cejas y la parte delantera de su cuero cabelludo también tenían este procedimiento pero en color negro, de esta forma disimilaba de ausencia de pelo en dichas zonas.
Como si esto fuera poco la autopsia reveló que tenía las rodillas magulladas y cortes en la espalda, pero lo más curioso es que su cabello en realidad era una peluca pegada a su cabeza calva.
Los detectives que trabajaron al inicio del caso, Orlando Martínez, Dan Myers y Scott Smith, confirmaron los tatuajes de Michael Jackson.
“Cuando vi su cuero cabelludo observé cómo la parte superior de su cabeza estaba calva. Además, tampoco tenía casi pelo en los costados”, detalló Smith.
El médico Christopher Rogers, quien supervisó la autopsia, confirmó que Jackson efectivamente sufría de vitiligo: «Por lo tanto, algunas áreas de la piel parecen claras y otras oscuras».
La autopsia también demostró que hubo intensos intentos por revivir al cantante tras ser encontrado muerto en su casa, los trabajos de resucitación de los paramédicos dejaron marcas como hematomas en el pecho e incluso costillas rotas.
Entre los detalles arrojados por la autopsia hubo uno muy perturbador: sus pies, los cuales supuestamente estaban llenos de callos, hongos y lastimados.
Al parecer, Michael Jackson sentía vergüenza de sus pies y siempre los llevaba cubiertos con medias, incluso en su vida privada, lo que le causó callos e infecciones por hongos severas que hacían parecer que su piel se estaba pudriendo.
Redacción Maduradas con información de Infobae