Vladimir Cortés es un inmigrante venezolano que trabaja como estatua humana en Bogotá (Colombia).
Cortés, quien decidió ganarse la vida representando a un minero debido a la riqueza de su país, relató a EFE que los venezolanos que se encuentran en Bogotá le colaboran con dinero.
Lleva cinco años viviendo en Colombia. Se radicó en Bogotá hace un año. Actualmente trabaja 6 días de la semana, entre las 10 am y las 6 pm. Tarda 30 minutos en pintarse. En su rostro exhibe una máscara que recuerda a la que se usan en las protestas para protegerse contra el gas lacrimógeno. Su vestimenta la acompaña con la bandera de Venezuela.
Aquí se lo presentamos:
Redacción Maduradas con información de EFE