Los ciudadanos norteamericanos no votan de forma directa en las elecciones presidenciales, sino por los electores, quienes son las personas nombradas por cada partido en los 50 estados de esa nación y en Washington DC.
Reuters/Jim Bourg/Pool
Eso quiere decir que no existe una elección en los Estados Unidos, sino 51, ya que aquel que gana en cada jurisdicción se queda con la totalidad de los electores que le corresponde.
En ese sentido, el estado con el mayor número de votos electorales es California, que cuenta con 55, mientras que las regiones más pequeñas solo aportan tres. Para convertirse en presidente de ese país se requiere conseguir al menos 270 de los 538 electores del Colegio, explicó Infobae.
Por tal razón, en vez de centrarse en las encuestas nacionales, se debe apreciar las de cada estado.
Un repaso realizado por ese portal web revela que el candidato demócrata Joe Biden encabeza los sondeos en 20 regiones, así como en la capital de la nación. En 18 de ellas, tiene una ventaja de más de 20 puntos, mientras que en los 3 restantes entre 5 o 10 puntos de diferencia contra el actual mandatario Donald Trump. Entre los 21, acumulan 233 electores, solo 37 menos de los que requiere para ser vencedor en los comicios.
A su vez, Trump lidera las encuestas en al menos 20 estados, en 14 de ellos por más de 10 puntos y en 6 por entre 5 y 10. No obstante, esas regiones son poco pobladas, por lo que solo suman 126 electores, 144 menos de lo que necesita para conseguir la reelección.
El resultado de la elección depende de cómo se dividan los diez estados restantes, en ellos, las diferencias en la intención de voto son menores a 5 puntos, o se encuentran entre 5 y 10. Sin embargo, se trata de distritos en los que los sondeos obtuvieron un margen de error demasiado grande en 2016. Entre los 10 suman 179 electores, por tal razón, son la clave para ganar los comicios.
“Es importante mirar las encuestas estatales, ya que nos dan una indicación de cuántos votos puede ganar cada candidato en el Colegio Electoral. En este momento, hay alrededor de diez estados peleados, incluyendo algunos como Texas y Florida, con un alto número de votos electorales. Biden y Trump están haciendo una fuerte campaña en ellos para ganar a los votantes indecisos y animar a sus seguidores a votar. Los encuestadores han mejorado su metodología para dar cuenta de los errores cometidos en 2016, pero sigue siendo un desafío determinar quiénes se presentarán y a qué candidato apoyarán los votantes indefinidos. Podemos confiar en las encuestas, pero debemos ser conscientes de estas posibles fuentes de error”, explicó a Infobae Mary Stegmaier, profesora de la Escuela de Asuntos Públicos de la Universidad de Missouri.
Cabe destacar que sigue latente el error en las encuestas de 2016, en las que el actual presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se encontraba rezagado en casi todos los pronósticos preelectorales, pero arrasó con los estados en disputa para ganar el Colegio Electoral.
Pero la constante ventaja del exvicepresidente de Barack Obama no ha dejado claro si las encuestas estarán en lo incorrecto otra vez.
Infobae resalta que Trump requeriría que los sondeos “tengan un error enorme” si quiere tener oportunidad de quedarse en la Casa Blanca, ya que el portal web asegura que Biden podría “ganar, incluso si las encuestas estuvieran desfasadas tanto como en 2016”.
Redacción Maduradas con información de Infobae.
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