Todo estaba listo para que Nicolás Maduro abandonara el poder en Venezuela este 1 de mayo. Así lo aseguró el periodista Laureano Pérez Izquierdo, quien reveló el plan que se había orquestado para ponerle fin al régimen.
El propio ministro para la Defensa, Vladimir Padrino López, habría sido quien diseñó un plan junto con el Consejo de Seguridad de los Estados Unidos (NSC, por sus siglas en inglés) para salir de Maduro.
Dentro de lo estipulado, estaba que los militares tomaran la base aérea de La Carlota, en Caracas, a primera hora del 1 de mayo. Sin embargo, el martes 30 de abril alguien ordenó liberar a Leopoldo López, una jugada que desconcertó a todos, entre ellos a Padrino López.
Por esta razón, todas las acciones previstas se anticiparon: el presidente encargado, Juan Guaidó, anunció la lealtad de los militares y el inicio de la caída de Maduro. Pero hubo un detalle. «Todos dormían«, informó a Infobae un general que estaba al tanto de todo el proceso.
La acción precipitada dificultó que Guaidó marchara respaldado hacia el Palacio de Miraflores.
Esta acción fallida del gobierno interino le permitió a la inteligencia tanto rusa como cubana detectar a los primeros «traidores» del régimen, entre los que destacó Manuel Ricardo Cristopher Figuera, director del todopoderoso Servicio Bolivariano de Inteligencia. Por eso Maduro nombró en su lugar a Gustavo González López.
Ahora, con el fracaso de este plan, el régimen empezará a buscar culpables y apuntará en su propio bando a quienes colaboraron con Estados Unidos para acabar con el mandato de Maduro.
Redacción Maduradas con información de Infobae