Mientras que en las conversaciones cotidianas de los venezolanos la pregunta obligada suele ser últimamente «¿cuántos kilos has perdido?», como consecuencia de la malnutrición o por sencillamente no poder ingerir las tres comidas diarias con su merienda, la anatomía cada vez más redonda del presidente Nicolás Maduro evidencia que por Miraflores no se sufre de ese mal.
Maduro lució una ajustadísima camisa verde en su alocución de este jueves y estaba sentado. En las imágenes compartidas por Prensa Presidencial, se puede ver que los botones estaban a milímetros de explotar.
#VIDEO ▶️Pdte. @NicolasMaduro llama a la unión de todas las fuerzas que conforman el Congreso de la Patria Ecosocialista pic.twitter.com/dIJpqM1bhW
— Prensa Presidencial (@PresidencialVen) March 22, 2017
Los rollitos casi no le caben en la pantalla, lo que permite suponer que no se ha visto obligado a sacrificar ninguna comida diaria.
Quizá por esa misma razón es que le parece tan gracioso que le hablen de la «Dieta de Maduro», o que tome como burla las muertes por yuca amarga que se han producido por el desespero de los venezolanos de comer casi cualquier cosa.
Redacción Maduradas.
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