Miguelina Fredes Sarasola abandonó su puesto de trabajo como maestra de primaria en una escuela de Campana en julio de 2022 para dedicarse exclusivamente a vender contenido erótico.
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La docente adoptó esa decisión después de que un grupo de padres descubriera que comercializaba fotografías y videos en una plataforma para adultos. “Me indigna porque no saben lo que hay detrás. Vengo sufriendo hostigamiento de los papás desde hace años, incluso en otra escuela. Y ahora me atacan por otro lado. Me investigan lo que hago con mi vida privada fuera del ámbito institucional”, explicó.
Fredes Sarasola, quien vive junto con sus hijos varones en una casa alquilada, admitió en una entrevista a TN que se enfocó en “vender contenido con mayor fluidez”.
“Lo hago sin tener vergüenza. Por suerte se me abrieron muchas puertas”, indicó.
La mujer de 28 años de edad ofrece su material erótico a través de sus cuentas en las redes sociales Instagram y Twitter, así como por WhatsApp.
“A veces los seguidores quieren hablar, y son muy respetuosos. No avalo ni me gustan las groserías. Cuando alguien me habla así lo dejo de lado. Entiendo sí que tienen sus morbos, pero no va conmigo”, explicó.
A partir de verse obligada a dejar su puesto de trabajo como maestra por la presión de los padres en la Escuela Normal N°30, Fredes Sarasola “profesionalizó” sus imágenes. “Trabajo con una persona con la que tengo confianza o a veces contrato una fotógrafa. La realidad es que me cuesta exhibirme con alguien que no conozco”, comentó.
“Con el contenido que vendo por WhatsApp puedo llegar a ganar cerca de $160 mil por semana. Metiéndole con todo, eh. Pero lógicamente varía, dependiendo el mes. A veces el público se renueva también, ese es un tope máximo”, precisó.
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Redacción Maduradas con información de TN.
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