Se puede estar absolutamente de acuerdo en que se consulte la calidad de la educación y que esta se mejore, pero no cómo se está planteando por Héctor Rodríguez. Cuestiono la “Consulta educativa” porque el deber de los gobiernos es incluir la educación en su plan de gobierno, y no meter su plan de gobierno en la educación.
Sinceramente, yo espero que jamás se eliminen las ciencias de la educación y que no se disminuya su importancia, ¿Sino cómo tendremos científicos como Jacinto Convit o Humberto Fernández-Morán? La educación que sea social, no socialista. Y que sea social no puede involucrar que no haya ciencias. No sé si de verdad busquen unir todas las ciencias en una sola asignatura, pero considero que cada ciencia debe verse por separado para simultáneamente, con el paso de los años, se vaya comprendiendo más y más como se relacionan las ciencias entre ellas, ¿O es que acaso la Organización del Bachillerato Internacional y el pensum educacional en la mayoría de los países con alta calidad educativa (o simplemente la mayoría de los países sin importar su calidad educativa) se equivocan?
Hablemos sobre lo que dice la ley sobre implementar el Plan de la Patria en la educación y sobre los medios que se están utilizando para hacerlo. En la guía para facilitadores de la Consulta Educativa establecen que esta “busca estrategias para la promoción de la relación entre educación y trabajo en el marco del Plan de la Patria”. Implementar como marco institucional el Plan de “la Patria” (o Plan Socialista de la Nación Simón Bolívar) en la educación es algo absolutamente irrespetuoso, pues este es un plan de gobierno, es un plan político y socialista, y la educación no puede basarse en una ideología o en un gobierno, sino en la tolerancia a todas las ideologías y el conocimiento suficiente para saber en qué se está de acuerdo y en qué no del gobierno y otras instituciones,
Si vemos en la Constitución, está textualmente indicado: “La educación está fundamentada en el respeto a todas las corrientes del pensamiento”. Sin embargo en el Plan de la Patria se venera ampliamente el socialismo y se dice en cambio que el capitalismo es perverso y depredador, ¡Déjennos pensar lo que queramos! Soy de centro, me parece que no es necesario ser radical en las ideologías, reconozco los errores del socialismo, el capitalismo y otras corrientes. Pero si se usa el Plan de la Patria como marco educativo, evidentemente ya no importará eso, la educación tendrá que ser socialista, como el Plan.
De acuerdo al artículo 104 de la Constitución “El ingreso, promoción y permanencia en el sistema educativo responderá a la evaluación de méritos sin injerencia partidista”, pero, ¿Si la educación se basa en el plan de gobierno del Partido Socialista Unido de Venezuela, no tendrán más posibilidades aquellos profesores con una ideología a su favor y con una participación activa en el partido? Le dejo la tarea al lector de responder la pregunta.
No tengo problema con que la educación tenga como obligatoria la enseñanza de los principios del ideario bolivariano como indica el artículo 107 de la Constitución, pues gracias a haber formado parte de la Sociedad Bolivariana de mi institución he podido observar muchas acciones del Partido Socialista Unido de Venezuela que son absolutamente en contra del pensamiento de Bolívar. Sin embargo, la educación debe permitir que se estudien las ideologías de Bolívar en el área social y no necesariamente en todas las áreas y durante todos los ciclos de educación, y la enseñanza de lo que pensó nuestro Libertador no puede limitarse a la parte que le conviene a la “Revolución Bolivariana”, sino que debe estar basada en las fuentes históricas y las distintas opiniones, contando con la posibilidad para los estudiantes de interpretar, contextualizar y contrastar.
En la Ley Orgánica de Educación, en su artículo 12, está también expresado que “No está permitida la realización de actividades de proselitismo o propaganda partidista en las instituciones y centros educativos del subsistema de educación básica, por cualquier medio de difusión, sea oral, impreso, eléctrico, radiofónico, telemático o audiovisual”. La educación puede mencionar, y debe, la historia contemporánea de Venezuela, pero debe ser imparcial en libros, material didáctico y en las aulas. Que cada alumno decida su tendencia política. No puede implementarse el plan partidista “de la Patria”, porque de por sí es propaganda partidista del PSUV.
Ya explicadas varias razones de por qué el Plan de la Patria no puede implementarse como marco educativo, voy a hablar de los errores que hacen que la Consulta Educativa sea un mal medio que lleva a un mal fin.
1. No toma en cuenta a los padres y representantes.
Hay guía para la discusión de primer a tercer grado, de cuarto a sexto grado, de primero a tercer año y para cuarto y quinto año. Hay incluso una guía para las Defensorías Escolares, y se establece como tema en todas estas guías “La participación de la familia, la comunidad, los niños, niñas y adolescentes en la gestión educativa”. A pesar de todo lo anterior, ¡No hay ningún debate establecido realmente para los padres y representantes! En la guía para los facilitadores busqué y busqué y tampoco conseguí nada que involucre a los padres, representantes, y familias en general, más que encuentros municipales con las familias, que no cuentan con ningún método de establecer las conclusiones de estos encuentros, ni para que los padres evalúen la educación.
“Los padres tendrán derecho preferente a escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos” dice la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que aunque no es vinculante por ser una declaración y no un tratado, forma parte del basamento de la Constitución, y en este caso se observa en el artículo 102 que menciona, entre otras cosas, que el Estado promoverá el proceso de educación ciudadana con la participación de las familias y la sociedad. Si de verdad esta consulta fuera seria, involucraría mucho más a los padres y representantes, a las familias… pero no lo hace.
2. Sus consultas son sólo cualitativas y sólo hacen preguntas a futuro.
Las preguntas de la consulta son “¿Cómo /deberían/podrían/ te gustaría…?”. Está bien, siempre es importante saber qué queremos nosotros los estudiantes para un futuro, pero ya que están haciendo una consulta, ¿Por qué no nos preguntan hasta ahora qué nos ha parecido el sistema educativo? Para poder ver qué novedades establecer en el área de la educación (y en otras áreas), siempre es importante ver un poco de que se opina de lo que se hizo en el pasado y lo que se hace en el presente para poder realizar acciones realmente útiles.
Sin embargo, quizás el problema en las preguntas de la consulta no es sólo que sean de lo que buscamos sin tomar en cuenta lo que hasta ahora hemos obtenido, sino que además de no haber una evaluación efectiva, los datos obtenidos son totalmente cualitativos y de desarrollo. ¿Por qué es esto un problema? Primero que todo, no creo realmente que la Zona Educativa o que Héctor Rodríguez o quién sea se pongan a leer todas y cada una de las respuestas de los estudiantes. Y segundo, para pasar a la conclusión y la evaluación siempre es importante la obtención y el procesamiento de los datos a analizar. No me opongo a las preguntas que nos invitan a desarrollar la escritura y que nos dejan extendernos, pero preguntas sobre la actualidad educativa que sean de “Sí” o “No” y que califiquen numéricamente a los profesores, programa educativo, infraestructura, preparación profesional, entre otros factores ayudan a complementar estas preguntas, y a formalizar estadísticas veraces.
En la Convención de los Derechos del Niño, artículo 12, se establece que los Estados parte, entre los que se incluye Venezuela, “garantizarán al niño que esté en condiciones de formarse un juicio propio el derecho de expresar su opinión libremente en todos los asuntos que afectan al niño, teniéndose debidamente en cuenta las opiniones del niño, en función de la edad y madurez del niño”, y me parece que no se tomarán realmente en cuenta las opiniones de los niños, pues una consulta debe ir más allá del hecho de si habrán o no nuevas canaimitas, o de cómo me gustaría que fuera mi colegio. Una consulta debe ver, dependiendo de la madurez del niño, si además de estar conformes con nuestros espacios educativos, estamos recibiendo una buena educación, ¿Por qué para la consulta no se hacen pruebas estandarizadas para los distintos niveles educativos que vean los conocimientos en cada asignatura y como varían por estado, municipio, parroquia y colegio, incluyendo si es una institución privada o pública? ¡Vaya usted a saber!
Están aprovechando la crisis política, social y económica para aumentar la concentración y abuso de poder en nuevas áreas, ¡No hay que permitirlo!