Un infante de apenas dos meses de edad falleció tras ahogarse con una pepa de mamón el pasado 29 de junio en el estado Lara.
El niño estaba junto a su hermano mayor, de 2 años, y su madre. El padre del bebé había llegado hasta el apartamento en el urbanismo Alí Primera, donde vivían con el resto de su familia.
El señor había traído una bolsa con unos mamones y el niño de dos años comenzó a comerlos y le dio de probar al bebé. La mamá de los infantes supuestamente le advirtió al hermano mayor que tuviese cuidado con introducir todo el fruto en la boca del pequeño.
La señora los dejó solos por espacio de dos minutos y, al volver, notó que el bebé se había tragado la pepa y no podía respirar. Aunque intentó auxiliarlo y detener la asfixia, no fue posible. Trasladaron al niño a un centro asistencial en el que declararon su muerte.
Redacción Maduradas con información de La Prensa de Lara.
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