A pesar de que buena parte de la comunidad internacional ha expresado su apoyo al presidente interino Juan Guaidó, aún no se ha logrado el principal objetivo de la ruta para la reconstrucción de la democracia propuesta por el mismo Guaidó: el cese de la usurpación. Por el contrario, Nicolás Maduro parece estar dispuesto a todo para atornillarse en el poder, junto con su selecto grupo.
Por tal motivo, analistas comentaron a Bloomberg los motivos por los que no se ha producido el quiebre definitivo que permita la instauración de un gobierno de transición.
La FANB es una de las instituciones más espiadas
De hecho, de acuerdo con Diego Moya-Ocampos, consultor de riesgo político en Londres, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) es una de las instituciones más espiadas no solo de Venezuela, sino del mundo entero y Maduro tiene su control.
No es casualidad, entonces, que solo unos pocos uniformados de bajo rango, un comandante sin unidades bajo su mando y dos corones, uno de los cuales está en EEUU, sean los únicos que se han unido a la causa de Guaidó.
Para Alonso Medina Roa, abogado defensor de derechos humanos, pedir a la FANB que se pongan bajo las órdenes de un nuevo presidente puede haber sido un “error”.
“Tenemos que recordar que las Fuerzas Armadas han sido un apéndice del partido socialista dominante por 20 años, y que la oposición solo está hablando con ellos ahora”, recordó Medina Roa.
Además, recordó que la FANB siguen “unidas” y las pocas rupturas producidas apenas pudieran generar desestabilización.
Sanciones sorteadas
A pesar de que Estados Unidos ha sido enfático en su pretensión de impedir operaciones comerciales con Venezuela, gracias a las sanciones económicas, lo cierto es que aún se producen operaciones de compra y venta con el país latinoamericano.
De hecho, una fuente anónima informó a bloomberg que no menos de 20 toneladas de cocaína se siguen movilizando entre Venezuela y Estados Unidos.
Los intentos de Maduro de redirigir sus exportaciones petroleras a La India y reforzar sus relaciones con China y Rusia son una manera de atenuar los efectos de las restricciones en el sector petrolero.
Poco tiempo de Guaidó en el poder
Sin embargo, el senador norteamericano Marco Rubio expresó el pasado 13 de febrero, su desacuerdo con el artículo de Bloomberg y aseguró que no es la postura de los políticos norteamericanos.
“Esta es la narrativa que quiere Maduro. El piensa que si puede resistir lo suficiente el momento de la oposición se desvanecerá y la presión internacional se suavizará (…). Solo han pasado tres semanas (desde que Guaidó asumió las competencias del Ejecutivo)”, dijo, a través de Twitter.
I haven’t heard a single relevant U.S. policymaker express this view on #Venezuela.
But this is exactly the narrative #Maduro is counting on. He thinks if he can hold on long enough the oppositions momentum will wane & international pressure will ease.
It’s only been 3 weeks. https://t.co/S0XgFZhr5a
— Marco Rubio (@marcorubio) February 13, 2019
Redacción Maduradas con información de Bloomberg
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