Mattia, el paciente número 1 con covid-19 de Italia, habló sobre su experiencia con la enfermedad luego de haber contagiado a su esposa embarazada, a un amigo y a sus médicos.
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“Enfermedad, curación, dolor y esperanza. Así puedo resumir mi historia de paciente con COVID-19 curado”, dijo el habitante del pueblo de Codogno, que hace poco fue dado de alta.
“Estamos suspendidos entre las ganas de que todo pase rápidamente para nosotros, nuestros seres más queridos y todos los demás y el temor de que todo esto no termine, al menos en poco tiempo”, señaló.
Este paciente infectó al personal sanitario del hospital de Codogno, así como a pacientes y a todo su entorno, entre ellos a su esposa embarazada y a su padre, quien posteriormente murió a causa de la enfermedad.
En Medio del caos en el que se había convertido su vida nació su hija, quien reconoce pasó a traerle un poco de esperanzas.
“Me enfermé, me recuperé, sufrí la pérdida de mi padre y me alegré por el nacimiento de mi hija”, dijo Mattia respecto al duro proceso.
“Vivimos, y nuestra vida tiene sentido solo cuando la esperanza abre una perspectiva ante nosotros. Esta esperanza para mí se materializó con el nacimiento de mi hija Giulia”, reconoció.
Mattia, un deportista de 38 años, fue el primer caso registrado en Italia sin relación con China.
Fue conocido en su país como el “paciente uno” que revelaba que el virus ya circulaba por el territorio italiano, para el 20 de febrero cuando fue ingresado al hospital con una grave neumonía.
Redacción Maduradas con información de Infobae