El caso de una joven venezolana de 18 años de edad que fue drogada y abusada sexualmente por su empleador en la ciudad de Buenos Aires, Argentina, continúa resonando en medios de comunicación y redes sociales, donde la sociedad exige justicia.
Gabriel Bastidas (@Gbastidas)
A continuación, los detalles cronológicos:
Suceso
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La joven víctima atendió una oferta de empleo publicada en Facebook, donde solicitaban vendedora para una tienda dedicada a la venta de uniformes para trabajadores de la salud.
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Al acudir a la entrevista, el empleador identificado como Irineo Garzón Martínez le comentó sobre los detalles del empleo. Sin embargo, al mismo tiempo le hizo preguntas personales. Por ejemplo, si era soltera o si aceptaba salir con él.
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La madre de la joven, alertada por la actitud del hombre, le pidió a su hija que por precaución le enviara la dirección del lugar, el nombre del dueño del local y una foto.
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Una vez en la tienda, el empleador le ofreció insistentemente algo de tomar. Aunque al principio rechazó los ofrecimientos, la joven comentó que en un momento de descuido tomó un vaso de agua que le dejaron cerca.
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A los minutos, comenzó a sentir mareos y las manos adormecidas. Antes de caer inconsciente, le avisó a su madre que no se sentía bien.
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La progenitora advirtió a la policía y acompañada por las autoridades acudieron al establecimiento. Tras derribar la puerta, la joven fue encontrada desmayada, con la ropa interior mal colocada y una camisa que presumen era de Garzón.
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La joven fue desalojada del sitio en una silla de ruedas y trasladada a un centro de salud, donde el personal médico confirmó que fue abusada sexualmente. Garzón, por su parte, fue detenido.
Acciones legales y protestas
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A pesar de haber sido capturado en flagrancia, Garzón permaneció arrestado solo dos días y logró ser puesto en libertad luego de que la jueza, Karina Mariana Zucconi, que lo imputó por «abuso sexual simple», aprobara su excarcelación por no poseer antecedentes penales.
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La medida ocasionó el rechazo generalizado de los ciudadanos que decidieron, espontáneamente, denunciar el suceso este jueves 28 de enero, en una concentración a las afueras del establecimiento comercial.
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Ante las críticas, la jueza Zucconi cambió la imputación de «abuso sexual simple» a «abuso sexual agravado por acceso carnal».
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Actualmente, Garzón tiene prohibición de salida del país, embargo de sus bienes personales y prohibición de contactar por cualquier medio a la víctima, o acercarse a su domicilio, mientras se resuelve la apelación para revocar su excarcelación.
Redacción Maduradas