La familia del joven peruano que fue lanzado desde lo alto de un puente presuntamente por ciudadanos venezolanos compartió el último mensaje que el muchacho dejó ver en sus redes sociales.
“Pongo mi vida en las manos de Dios porque sé que, con él, nada me faltará”, escribió el muchacho el pasado 22 de enero.
El joven de 19 años de edad fue identificado con el nombre de Silvano Oblitas Cántaro Tolentino, quien habría viajado con un amigo a Colombia el pasado 25 de enero, según dijo la hermana de la víctima. La idea era que comprara ropa para venderla en Perú.
De acuerdo con lo reseñado por Ojo, Cántaro trabajaba en el Mercado de Santa Anita, ubicado en Lima, vendiendo papas.
Redacción Maduradas con información de Ojo
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