La niña Isabella Belandria, de dos años, fue rescatada de entre los escombros que la tenían tapada hasta el cuello el pasado 23 de agosto en Tovar, estado Mérida, luego de los deslaves y derrumbes en la zona por las constantes lluvias.
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Su bisabuelo, José Arcenio, de 70 años, la sacó con vida de ese lugar, un hecho que su abuelo José Luis Romero, calificó como «un milagro».
La pequeña sufrió una fractura en el brazo y el cráneo, pero se recupera rápidamente.
Isabella debe permanecer tranquila, alejada del ruido y descansando para poder recuperarse completamente, sugirió el personal médico que la atiende.
Romero destacó que su padre, quien sufre varias complicaciones de salud, fue capaz de mover piedras y escarbar entre los escombros para sacar la niña con vida, además la llevó a través de un terreno hasta el camión de los bomberos.
En la habitación de donde rescataron a Isabella, luego de que un gran árbol cayera sobre la vivienda, había una imagen de yeso del Sagrado Corazón de Jesús, a un lado quedó la pequeña.
«Esa imagen tiene muchos años, era de la abuela de mi esposa, y siempre le rezamos a la imagen, por eso estar cerca de Dios ayuda», señaló el hombre.
Redacción Maduradas con información de Caraota Digital.
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