Chrystia Freeland, ministra de Relaciones Exteriores de Canadá, informó en una nota de prensa emitida por el gobierno de su país que acordaron denigrar las relaciones diplomáticas con Venezuela tras las elecciones de este domingo denunciadas como fraudulentas por la comunidad internacional y en las que Nicolás Maduro fue declarado ganador.
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Entre las medidas que tomará el gobierno canadiense es que ya no habrá presencia de un embajador en Venezuela, sino de un encargado de negocios.
“Las elecciones presidenciales de ayer en Venezuela son ilegítimas y antidemocráticas. Tanto en el periodo previo como el día de las elecciones, el régimen de Maduro se mostró reacio a intentar seriamente garantizar que cumplieran con los estándares democráticos e internacionales de libertad e imparcialidad” manifestó la funcionaria, según una nota de prensa compartida por el Gobierno de Canadá.
El gobierno de dicha potencia americana considera que el régimen de Maduro restringió los derechos y la libertad de los venezolanos al impedir la libre participación de los partidos de la oposición.
“Canadá rechaza el proceso electoral venezolano y sus resultados, que no representan la voluntad democrática de los ciudadanos de Venezuela. Canadá y sus socios en el Grupo Lima, así como otros socios internacionales como la Unión Europea, han pedido reiteradamente al régimen de Maduro que libere a todos los presos políticos, designe un nuevo e independiente Consejo Nacional Electoral, ponga fin a las restricciones a la libertad de prensa y permita que todos los actores políticos participen libre y plenamente”, puntualizó.
En tal sentido, aclararon que la degradación de la relación diplomática con Venezuela implica tener un Encargado de Negocios en lugar de un embajador; mantener la prohibición existente sobre el apoyo de Canadá a las candidaturas venezolanas a organizaciones multilaterales e internacionales; imponer una prohibición a la cooperación militar bilateral formal y ordenar a los funcionarios del Gobierno de Canadá que no asistan a reuniones y eventos internacionales o multilaterales auspiciados por o en Venezuela, así como restringir la emisión de invitaciones a altos funcionarios del Gobierno venezolano y militares para que asistan a eventos en Canadá o en los que sea anfitrión, excepto cuando sean directamente relevantes para las prioridades de la política canadiense.
Redacción Maduradas con información del gobierno canadiense
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