El consejo de Derechos Humanos de la ONU expresó este jueves «serias preocupaciones» sobre la «imparcialidad de los jueces y fiscales» en Venezuela, y lo hizo en presencia del presidente venezolano, Nicolás Maduro.
El organismo de Naciones Unidas aseguró que los casos del líder opositor Leopoldo López, encarcelado en febrero de 2014, y el de la jueza María Lourdes Afiuni, que obtuvo en 2013 la libertad condicional tres años y medio después de ser detenida por un caso de supuesta corrupción, son «ilustraciones evidentes» de esa falta de imparcialidad.
El alto comisionado de Derechos Humanos de la ONU, Zeid Ra’ad al Hussein, denunció hoy la presión a la que son sometidos los jueces y fiscales venezolanos, especialmente cuando tratan con «casos políticamente sensibles».
«El Grupo de Trabajo sobre Detención Arbitraria y el Comité de Derechos Humanos, así como mi propia Oficina, han expresado serias preocupaciones sobre la independencia del poder judicial en Venezuela, la imparcialidad de los jueces y fiscales y las presiones que enfrentan cuando se trata de casos políticamente sensibles», indicó Zeid.
El alto comisionado realizó esta alocución por teleconferencia desde Nueva York minutos antes de que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, interviniera ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, en una sesión especial organizada a petición de su gobierno.