En un revelador artículo, la abogado y analista chavista Eva Golinger ofreció detalles de la estrecha relación de colaboración y «protección» entre el presidente Nicolás Maduro y el mandamás del Tribunal Supremo de Justicia, Maikel Moreno.
Foto: El Observador Mendocino
Golinger refirió el pasado criminal que se la achaca a Moreno y cómo a pesar de eso, ha sido favorecido por Maduro desde los tiempos en que este era canciller:
«El actual jefe de la Corte Suprema de Venezuela, o Tribunal Supremo de Justicia (TSJ, por sus siglas en inglés), Maikel Moreno, también ha estado implicado en las redes de extorsión criminal y el tráfico de drogas durante más de una década. Luego de su expulsión en 2007 por corrupción judicial, como resultado de una investigación ordenada por el entonces presidente Hugo Chávez y conducida por el TSJ, el entonces ministro de Relaciones Exteriores, Nicolás Maduro (ahora presidente) lo recompensó con cargos diplomáticos en Italia y Trinidad y Tobago. También se casó con una mujer cubano-estadounidense diez años mayor que él en Miami, posiblemente para obtener la residencia permanente de los Estados Unidos como parte de un ‘plan B'», refiere Golinger.
Recuerda también que Moreno pasó varios años viajando docenas de veces a Miami y República Dominicana, «donde supuestamente posee propiedades de lujo. No fue hasta después de la muerte de Chávez en 2013 y el ascenso de Maduro a la presidencia, que Maduro solicitó el regreso de Moreno. Lo nominó para el Tribunal Supremo y, en dos años, lo nombró presidente del poderoso cuerpo judicial».
Hace mención a las denuncias del exmagistrado Christian Zerpa, quien denunció en Miami que Moreno estaba usando el TSJ como un «brazo legal» del gobierno de Maduro, para hacer cumplir sus decretos, legitimar su elección y neutralizar a sus oponentes.
Otro episodio que daría cuenta de la estrecha amistad entre Moreno y Maduro fue lo ocurrido en 2007, cuando al actual presidente del TSJ lo destituyeron como juez de la Corte de Apelaciones porque había liberado indebidamente a dos sospechosos de asesinato, según su fallo.
A pesar de su derrocamiento, Moreno se habría mantenido tranquilo y habría confesado a cercarnos que aliados como Maduro, a quien Chávez acababa de nombrar ministro de Relaciones Exteriores, lo ayudarían. ‘
«Maduro y Cilia me protegerán», supuestamente habría dicho Moreno a una fuente cercana en ese momento. «Casi de inmediato, Maduro envió a Moreno a un puesto diplomático en Roma. Después de un año, Maduro envió a Moreno a Trinidad y Tobago, un país caribeño mucho más cerca de casa, donde ocupó un puesto comercial en la embajada de Venezuela hasta 2010″, se destaca en el artículo.
Redacción Maduradas con información de Mavenroundtable.io
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