Aún cuando el Gobierno controla los precios de una larga lista de alimentos, cuenta con una importante estructura de agroindustriales y posee miles de hectáreas en el sector agrícola, los resultados no son los esperados, pues de acuerdo a las cifras presentadas por el Banco Central de Venezuela el precio de los alimentos se incremento un 76.2% y en cuatro ciudades supera el 80%.
Los habitantes de San Cristóbal sufrieron un incremento interanaul del 87% en en la Caso de Valencia el aumento fue de un 85% mientras que en Maturín y Barquisimeto fue de 81.3% y 80.6%.
Cabe destacar, que la inflación en Venezuela proviene de distintos sectores, el Gobierno se ha valido de imprimir billetes en el BCV para poder cubrir sus gastos. A su vez, la oferta no responde porque ha caído la producción de empresas publicas y el sector privado no responde adecuadamente porque el control de precios impiden cubrir los gastos.
A esto se le suma, que 20 alimentos básicos como la leche en sus distintas presentaciones, compotas, azúcar, café molido, aceite, mortadela y harina de maíz precocida registran una escasez superior a 30%, así lo reseña el diario El Universal.
Diversos analistas coinciden que la manera para frenar la escasez es sincerando los precios de los alimentos regulados, a fin de impulsar una mejor producción, sin embargo esto implicaría mayor inflación a corto plazo.
Desde principios de año el Gobierno ha tratado de frenar el desbastecimiento con un plan de importaciones por 4 mil 300 millones de dólares que incluye compras a países como Argentina, Brasil y Uruguay.