¡Chantaje! Plan de alimentación “casa por casa” no llegará a familias que no estén censadas por el consejo comunal de su sector, dejando por fuera a familias que no estén dispuestas a exhibirse como simpatizantes del proceso revolucionario por una pírrica bolsa de comida.
A media mañana pocas personas esperan a las afueras de un Mercal. A cada rato se acerca alguien a preguntar si van a empezar a vender otra vez por número de cédula, si hay que anotarse en alguna lista o si reabrieron porque llegaron los productos. Los encargados de controlar la entrada responden con otra interrogante: ¿Usted está anotado en el censo de su consejo comunal? «¿Y si no pertenezco a ningún consejo comunal?». Esta es la pregunta más recurrente. Unos piden hablar con alguno de los organizadores de la venta porque es su vecino desde hace años.
Foto :El Pitazo.
El censo y el consejo comunal vuelven a ser la condición, el paso uno infranqueable, según quienes dan la información.
La historia se repite en otros sectores populares como San Agustín del Sur o La Vega. Igual ocurre en edificios de Quinta Crespo, Las Acacias, El Valle o Santa Rosalía, solo por mencionar algunas zonas de Caracas.
En la sede del PSUV aseguran que ellos no manejan la información, sino los consejos comunales: «Si no forma parte de uno tiene que buscar el más cercano y registrarse para que pueda entrar en el censo. Ellos pasan por las casas de 6:00 pm a 7:00 pm para que la gente ya haya llegado de sus trabajos», explica una persona en la sede del partido.
NUEVA LOGÍSTICA
La idea del “casa por casa” fue entendida en las comunidades como una especie de operativo con el cual un grupo se encargaría de llevar una bolsa de comida por vivienda; en su defecto, el jefe o jefa de cada hogar podía ir a buscar su bolsa de comida donde le indicaran.
Pero la entrega de la bolsa no es tal. Se trata más bien de una compra asignada por listas que controlan los consejos comunales y se limita a la distribución de la red pública de alimentos.
El dirigente político de la MUD, Jesús Torrealba, recogió denuncias de comunidades en el interior del país, en las que mostraba fotografías de un papel que llaman «carnet de residencia» o «tarjeta de abastecimiento» para la entrega de alimentos.
Con información de Tal Cual