El presidente Nicolás Maduro dirigió ayer su discurso ante la Asamblea General de la ONU, luego de una jornada de contratiempos, dimes y diretes en la que hasta rodó el rumor de que se reuniría con el mismísimo Donald Trump.
Esto no ocurrió y Maduro no tuvo otra que drenar su malestar durante su alocuación de 46 minutos, ante un auditorio casi vacío y recibiendo poca atención de los pocos presentes.
Y es que como bien lo comprueba este «selfie» de uno de los miembros de su equipo de protocolo, el jefe de Estado quedó hablándole a las paredes.
Ricardo Sánchez, miembro del protocolo diplomático, aprovechó el vacío discurso para lanzarse esta autofoto y mandarlo directo a sus historias de Instagram.
Redacción Maduradas
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