Aunque todavía queda mucho por saber, con el paso de los días se aprende cada vez más sobre el coronavirus, enfermedad que ha afectado más a los adultos mayores, pero de la que no están exentos los jóvenes.
En un principio, los datos que provenían de China, epicentro del brote, indicaban que las personas de avanzada edad y con patologías previas eran las más vulnerables. Sin embargo, hay jóvenes, desde los veintitantos y hasta principios de los cuarenta, que se encuentra gravemente enfermos.
“El riesgo de que los jóvenes hagan formas complicadas es bajo, pero uno no puede saber a priori cuál puede tener evolución favorable o cuál se puede llegar a complicar. Por otro lado, son igual de transmisores del virus que el resto de la población, pero a veces por esa sensación de bienestar y de bajo riesgo que da la juventud no son conscientes del peligro que representan para la comunidad”, indicó a Infobae el infectólogo Pablo Bonvehí, quien integra la mesa asesora del Ministerio de Salud de la Nación.
Un número importante de adultos jóvenes han hecho caso omiso a las recomendaciones de sus autoridades de mantener el distanciamiento social o a cumplir tiempos de cuarentenas para evitar la propagación del coronavirus porque se creían inmunes a la enfermedad.
“Si bien se sienten potentes y vigorosos en lineas generales, y no son el público más vulnerable, los jóvenes pueden por distintas circunstancias -emocionales, de pérdida o de quebranto de alguna especie emocional- convertirse en más vulnerables. Desde la psiconeuroinmunoendocrinología está probado que hay una conexión con la fortaleza y debilitación del sistema inmunitario”, advirtió en diálogo con Infobae Elsa Wolfberg, psicoanalista y psiquiatra de la Asociación Psicoanalítica Argentina (APA) y vicepresidente del Capítulo de Prevención Cuaternaria, Psiquiatría Preventiva y APS de la Asociación de Psiquiatras Argentinos.
Redacción Maduradas con información de Infobae.
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