Nicolás Maduro Guerra pasa casi desapercibido ante una gran multitud. Pocos son los que reconocen que es el hijo del presidente Nicolás Maduro. Suele vestir sencillo, con jeans, camisas deportivas o chaqueta tricolor y zapatos de goma. Tiene la estatura de su padre, pero, de cerca no se le parece tanto. Los chavistas que logran identificarlo no pierden la oportunidad de acercarse y pedirle una “ayudaíta”.
En el Teatro Principal presentaron, este martes 28 de abril, el balance de las postulaciones en la región Capital (Distrito Capital, Vargas y Miranda). Una señora de edad avanzada abrazó a “Nicolasito” y le pidió que no se olvidarán de los Valles del Tuy, que se echara un pasada por allá. “Me voy a volver un tormento”, le dijo la señora que vestía una camisa roja de “Chávez, corazón del pueblo”.
El hijo del, también, presidente del Partido Socialista Unido de Venezuela, dio a conocer que fue postulado el pasado 19 de abril por el circuito El Valle- Coche, pero que no aceptó. “No es el momento, hay más cosas que hacer”, precisó a Efecto Cocuyo.
Maduro Guerra, en la actualidad jefe del Cuerpo de Inspectores Especiales de la Presidencia, no puntualizó cuáles tareas gubernamentales le podría asignar su padre en el futuro cercano.
“Soy joven, todavía queda mucho camino”
Es de hablar comedido y, prácticamente, hay que sacarle las palabras con cucharilla. “Soy joven, todavía queda mucho camino”, dijo con una sonrisa tímida, la de quienes no están acostumbrados a la atención. Maduro Guerra agregó que seguirá trabajando con las bases para que, cuando sean las elecciones parlamentarias, El Valle y Coche den una victoria al Psuv.
El hijo de Maduro recordó que en ese circuito encabezan las postulaciones el diputado Jesús Faría, quien aspira a la reelección, y la dirigente de la Juventud del Psuv, Gabriela Graterol.
En la presentación del balance estaba el vicepresidente de la tolda roja, Elías Jaua, quien dijo que hay muchas postulaciones de la juventud, porque requieren una “juventud politizada”. Maduro Guerra aplaudió la moción.
Por: Dayimar Ayala Altuve / @dayidayi / Efecto Cocuyo