Mientras el superintendente, Andrés Eloy Méndez informaba sobre la fiscalización de una cantidad considerable de alimentos a una empresa privada, un grupo de personas que se encontraban en el lugar comenzaron a pitarlo como muestra de descontento con las medidas tomadas.
Méndez informaba que se realizó «un convenio con PDVAL junto con la red privada para asegurar la distribución de la mercancía en el estado Barinas”
Recalcó que las evaluaciones se adelantaron por días, a puerta cerrada, con la asistencia además de los trabajadores y el poder popular para verificar la existencia de presuntas irregularidades en la venta de pollo con valores elevados por parte de intermediarios o los denominados caveros.
También se supo que ayer en horas de la noche se procedió a la venta del pollo a los vecinos de las comunidades aledañas a un precio de 48 bolívares. .