«El héroe de los pobres» como hacen llamar a Hugo Chávez dentro de las filas del chavismo, podría estar más cerca de la realidad de lo que se cree, pero quizás no por el significado literal del título, sino porque sumió a los pobres en más pobreza, y les dio la falsa ilusión de estar rescatándolos. Creó un pensamiento de país donde la igualdad se mide hacia abajo, es decir, mientras más pobres mejor, pero en simultaneo, mientras más ricos sean los que están al poder, mejor también.
Visto como un héroe por los pobres, por sus prácticas populistas, Chávez sin duda supo abusar del recurso venezolano para su fin propio, misiones de ayuda a los pobres, dinero y regalos a montón sin promesas de nada más.
El “arañero de Sabaneta” no enseñó a los pobres la dignidad del trabajo, pero si a que lo alabaran para que dependieran de él. Países de la región, como Nicaragua, también celebran el natalicio de quien por muchos años de su Gobierno también les dedicó la ayuda proveniente de los recursos venezolanos.
Chávez fue el aliado político más importante del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, desde que este volvió al poder en 2007. En ese país, homenajearon su natalicio con actividades, entre las que hubo encuentros departamentales de estudiantes becados del ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de América) y un festival infantil en la Escuela Hugo Chávez.
El mandatario venezolano murió en marzo de 2013, tras no poder superar un cáncer contra el que batalló durante cerca de dos años, durante su Gobierno, aunque para los pobres siempre fue un héroe, supo desbancar al país de las riquezas que llegaban, “ser rico es malo”, decía, pese a que hoy en día, se dice que su familia es una de las más ricas de la región.
Su sucesor, Nicolás Maduro, también ha heredado esta política de populismo, con menos resultados sin embargo, pues lo que no se ahorró durante la bonanza petrolera, ahora se enseñó a los pobres a recibir pescado pero no los enseñó a pescar.
Con información de El Venezolano News.