Usuarios que frecuentan la ruta Caracas- Los Teques denunciaron que ha aumentado el número de robos violentos en unidades de transporte. Al parecer, los ladrones se hacen pasar por pasajeros y, luego de que las unidades, salen de sus paradas, secuestran las camionetas y las llevan a Petare.
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De hecho, según reportó El Pitazo, algunos usuarios denunciaron que el pasado 9 de marzo se produjo un atraco en la referida ruta. Cuatro hombres armados se subieron a una unidad en el terminal de Nuevo Circo, y cuando esta inició el movimiento, la desviaron hacia Petare para cometer el robo.
Así mismo, el pasado 23 de febrero, ocurrió algo similar que los pasajeros señalaron como «traumático«, ya que los ladrones amedrentaron a varios ciudadanos.
«Un policía supuestamente revisó a los pasajeros, entre ellos a cuatro hombres y una mujer que se subieron juntos. Apenas salimos de Plaza Venezuela, ellos secuestraron el autobús y a los 10 minutos iniciaron el maltrato y robo a todos los presentes«, dijo una mujer que se trasladaba en la unidad, junto a su madre y su hija de siete años de edad.
Detalló que la mujer que estaba robando le puso una rodilla encima de la barriga a una mujer embarazada y la amenazó con hacerla perder a su bebé.
«Varios pasajeros quedaron con golpes fuertes en la cara. Inclusive le metieron una pistola en la boca a uno de los pasajeros y al chofer lo tenían apuntado con otra», afirmó la mujer.
Luego de esto, la unidad de transporte fue desviada a Petare. A pesar de haber pasado por varias alcabalas, los ladrones le exigieron al conductor que actuara normal. Ya estando en el barrio, los pasajeros fueron despojados de todas sus pertenencias.
«A nosotras no nos golpearon porque fuimos las primeras en entregar todo y siempre colaboramos», agregó.
Tras el incidentes, los ladrones se bajaron en Petare y el conductor retornó a Plaza Venezuela, donde los policías revisaron la unidad y tomaron los datos de los pasajeros.
Las víctimas y los pasajeros habituales hicieron un llamado a las autoridades para que tomen «en serio» la vigilancia. Al parecer, los uniformados refuerzan la vigilancia, durante días posteriores a un robo y, cuando la presencia oficial disminuye, los delincuentes retornan.
Redacción Maduradas con información de El Pitazo
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