El día de ayer a las 8:00p.m., la esposa de Wilmer José Berríos Hernández (36), fue a buscar a sus hijos que se encontraban al cuidado de unos familiares en el sector La Pradera de Petare. De regreso, antes de llegar a su casa en la calle Germán Lira de la referida comunidad, encontró a su esposo en la vía pública con varios impactos de bala.
La víctima fue hallada sin su teléfono y una cadena que le habían regalado. Presumen que lo mataron para robarlo. Él tenía una empresa de instalación de persianas en su vivienda. “Nos imaginamos que fue asesinado para despojarlo de sus pertenencias porque él no tenía problemas con nadie”, dijo su cónyuge, quien prefirió mantener su nombre en reserva.
Sus parientes relataron que no es la primera vez que pierden a un allegado por la violencia. Un hermano de Wilmer fue asesinado hace seis años para atracarlo. Se llamaba Alexis y fue interceptado por un grupo de antisociales en el sector El Encantado de Petare para arrebatarle su teléfono. También Dorelis Pérez (33), cuñada de Wilmer, la mataron hace tres años, cuando viajaba en un taxi. En el vehículo viajaban cinco pasajeros y antes de llegar al sector La Pradera, unos sujetos lo emboscaron para robar a los ocupantes. Los antisociales dispararon y una de las balas impactó a Dorelis y alcanzó al chofer que también falleció, reseñó el diario El Universal.
“Ambos crímenes quedaron impunes, así que no podemos esperar que se haga justicia en el caso de Wilmer. Confiamos en la justicia divina porque lo que se hace aquí en la tierra, aquí se paga”, dijeron los familiares.