Grupos de desconocidos se citan en lugares privados para jugar a la «ruleta rusa sexual», la nueva práctica que ha generado preocupación en Estados Unidos y América Latina.
La logística consiste en que los hombres deben formar un círculo y en el centro debe estar la ronda de las mujeres, todos deben estar desnudos.
Ambos círculos giran en direcciones contrarias al ritmo de la música, cuando esta se detiene quedan encaradas hombre y mujer.
El reto consiste en que deben tener relaciones sexuales con la persona que les tocó sin ningún tipo de protección.
La dinámica se repite, cada vez con menos integrantes, hasta que gane el más resistente.
La peligrosa y perturbadora razón por la que se llama «ruleta rusa sexual» es porque uno de los participantes tiene Sida y nadie puede saber quién es.
Redacción Maduradas con información de Infobae y el Universal de México.
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